domingo, 4 de julio de 2021

Alumnos de la escuela de niños de Los Cristianos. 1930-1934

 


Alumnos de la escuela de niños de Los Cristianos. 1930-1934

 

“La situación educativa en el primer cuarto del siglo XX en el municipio de Arona continua con los mismos problemas con que finalizó el siglo XIX. Entre las causas que explican el alto grado de analfabetismo, y ya reflejadas en La instrucción pública en Arona (Tenerife) durante el siglo XIX, por Carmen Rosa Pérez Barrios, están la falta de infraestructuras adecuadas, la escasa preparación y profesionalidad de parte de los enseñantes, y por último los gastos del sector, que incluían las retribuciones del maestro se pusieran a cargo de los pueblos. Otro factor a tener en cuenta, y que también lo apunta Pérez Barrios para el siglo XIX, es el aislamiento de la comarca, que produce un incesante trafico de maestros, lo que repercute negativamente en el buen desarrollo de la educación del Municipio.

Esta realidad tiende a mejorar con la constitución, el 14 de octubre de 1923, de la Junta Local de Primera Enseñanza, bajo la Presidencia del alcalde Eugenio Domínguez Alfonso. En sesión celebrada el 12 de agosto de 1925 se toma el acuerdo, visto el abandono en que se encuentra la primera enseñanza, de crear cuatro escuelas más: dos escuelas unitarias en Los Cristianos, una unitaria, de niñas, en el Valle de San Lorenzo y una escuela mixta a cargo de maestro en Cabo Blanco. Este acuerdo se traslada al Pleno Municipal, el cual con fecha del 20 de agosto solicita que por la presidencia se eleve solicitud al Ilmo. Sr. Director General de primera enseñanza la creación de las cuatro escuelas ya mencionadas. El Ayuntamiento se compromete al pago de la casa-habitación, local escuela y mobiliario.

Las dos escuelas, una de niños y otra de niñas, de Los Cristianos y la de niñas del Valle de San Lorenzo se crean definitivamente por Real Orden de 18 de enero de 1930. La Escuela Mixta de Cabo Blanco, a cargo de maestro, la crea el Ministerio de Instrucción Pública y Bellas Artes de forma provisional a través de Real Orden con fecha 13 de noviembre de 1930; y definitivamente por una Orden con fecha del 18 de mayo de 1931. Cuatro nuevas escuelas que se suman a las tres existentes: dos en Arona y una de niños en el Valle de San Lorenzo.


La Escuela de niños de Los Cristianos, a la que pertenecen los alumnos que aparecen en la fotografía, estaba ubicada en un local alquilado a José Martín Rodríguez, donde en la actualidad está el edificio “Don José”. Este local reunía, según acta con fecha 20 de septiembre de 1929, las condiciones adecuadas de construcción, higiénicas, sanitarias, que se solicitaban. Con una superficie de cincuenta y dos metros cuadrados; estando habilitada para contener un máximo de 52 alumnos y que el material y entre el mobiliario que en ella se encontraban podemos apuntar: un Crucifijo, un retrato de S.M. el Rey, veinte mesas bancos bipersonales modelo del Museo Pedagógico Nacional, una mesa para el maestro, un sillón para el mismo, dos sillas, un escudo para la puerta, una bandera nacional con su correspondiente hasta, un armario, una papelera, una colección de mapas geográficos de las partes del mundo, de España y Canarias, dos cuadros de Geografía Física, una colección de láminas de Historia Sagrada, (...) Una pizarra de madera de tamaño grande, (...), un libro registro de matricula y asistencia, (...), dos litros de tinta, dos cajas de plumas, sesenta portaplumas, cincuenta lapiceros, cincuenta gomas de borrar, cien cuadernos rayados para escritura, cien libretas rayadas para trabajos escolares, (...), una docena de ´Lenguajes de los niños´, una docena de ´Camaradas´, una docena de ´Lecciones de cosas´, seis ejemplares de ´Infancia´, una docena de ´Primer manuscrito´, tres ejemplares del ´Quijote´,...Firman este acta  el Alcalde Eugenio Domínguez Alfonso y actuando de secretario del Ayuntamiento Miguel González Barroso. Participaron en su elaboración el inspector de primera enseñanza, José Ruiz y Galán; el médico titular, Manuel Cabrera Valdivia; y el maestro de obras, José Almeida Hernández.

La fotografía de referencia fue tomada a comienzos de la década de los treinta, entre 1930 y 1934, periodo en que el maestro José Navajas Llarena ejerció en Los Cristianos. Los alumnos, y según nos apunta Sebastián Martín Melo, comenzando por la fila superior, y de izquierda a derecha, son: (desconocido). Manuel Melo. Eustaquio Domínguez Martín (duda). Martín Rodríguez Melo. Miguel Ledesma Hernández. Román Domínguez Martín. Ignacio García Martín. (Desconocido). Fila central: Leónidas Melo Tavío. Luciano García. Abelardo Melo Alayón. Esteban Alayón. (Desconocido). Basilio Domínguez Martín. Ceferino Perera. Luis González. Graciliano Valentín Díaz. José Melo. Domingo Perera. Sebastián Martín Melo. Fila inferior: José Domínguez Martín. Domingo Valentín. Manuel Domínguez Martín. (Desconocido). (Desconocido). Antonio Ledesma Hernández. Manuel Brito. (Desconocido). Antonio Melo. Félix Sierra Melo y Manuel Melo Barrios.”

 

Documentación: BRITO, Marcos: Los Cristianos 1900-1970. Vida cotidiana y fiestas populares. Llanoazur ediciones.

 

 


 

 

Calle Domínguez Alfonso. Arona

 

Calle Domínguez Alfonso. Arona

 

Esta calle se denominaba Calle Nueva; todavía conserva su nombre, en cerámica, incrustado en la pared de la primera casa, recorriéndola desde el sur; hasta que se cambió su designación por la de Domínguez Alfonso, en el Pleno Municipal celebrado el 28 de enero de 1917, bajo la Presidencia de Antonio Fraga Tavío, en honor a la memoria del finado: Antonio Domínguez Alfonso, abogado y político de gran renombre, que nació en Arona en 1849. Durante casi cuarenta años poseyó una gran influencia en la vida social y política, regional y nacional. Fue elegido en seis ocasiones como Diputado por Tenerife, por primera vez en 1879. Además, destacar de sus extensas ocupaciones, su estancia de cinco años en Filipinas, donde ocupó los cargos de Gobernador de Manila e Intendente General de Filipinas; y su elección, en dos ocasiones, como Senador en representación de la provincia de Canarias, la última pocos meses antes de su muerte, acaecida el 28 de diciembre de 1916.

La fotografía tomada desde la parte sur de la calle se publicó en la revista Hespérides de septiembre de 1927, en la que se contempla, a la izquierda, la que se conoce como la casa de Antonio Domínguez Alfonso, sobrino del anterior; y a continuación la que fue de María Amalia Frías Domínguez, con la palmera que la identifica claramente. A la derecha estaba la escuela de niños y la casa del maestro. Al fondo se aprecia la trasera de la Parroquia de San Antonio Abad, detrás del conocido por “árbol de Pepe Almeida”.

 

Documentación: BRITO, Marcos: Arona en el recuerdo. Llanoazur ediciones, 2001.