![]() |
El Cristo de la Salud y su vara, 1962 |
La llegada del primer domingo de octubre, y su
posterior lunes, cuando se conmemora los festejos en honor del Santísimo Cristo
de la Salud, se esperan en Arona con impaciencia y alborozo. Desde todos los
rincones del Sur llegaban devotos de esta Imagen que se encuentra en la
Parroquia de San Antonio Abad desde 1806, tal como describe en la “Historia de
Arona”, Carmen Rosa Pérez Barrios. La plaza, que desde la década de los
sesenta, lleva su nombre: Plaza del Cristo de la Salud, se iba poblando de
peregrinos, desde el alba, para asistir a esos primeros oficios religiosos, que
en estos años se denominaba “Misa de peregrinos” y comenzaban a las seis o
siete de la mañana. Plaza que se llenaba de plegarias pero también de fogones
de carbón para la carne asada, de garrafones de vino, de dulces artesanales, de
parrandas por doquier, de jóvenes estrenando vestimentas o de chiquillos
rebozando alegrías.
Dos hechos acaecieron en la
década de los sesenta para enaltecer la Imagen del Cristo de la Salud, dos
acontecimientos que fueron iniciativa de la Corporación Municipal de Arona, a
propuestas de su Alcalde-Presidente Buenaventura Ordónez Vellar. El primero de
ellos se aprobó en la sesión extraordinaria celebrada el 17 de agosto de 1962,
en la que se acuerda designar al Santísimo Cristo de la Salud, Alcalde Perpetuo
de Arona, según los puntos siguientes: “1.- Nombrar al Santísimo Cristo de
la Salud, Alcalde Perpetuo de Arona. 2.- Como signo distintivo de su Mando, se
adquirirá un bastón de mando que será presentado y entregado a su Sagrada
Imagen en las próximas fiestas de Octubre del corriente año, así como un
pergamino en el que conste el acuerdo de la Corporación y que se guarden en la
Iglesia Parroquial de Arona y otro igual en el Ayuntamiento. 3.- Dar
conocimiento de dicho acuerdo al Excmo. e Iltmo. Sr. Obispo de la Diócesis, al
Excmo. Sr. Gobernador Civil y a los Sres. Párrocos de Arona y Valle de San
Lorenzo de Arona. 4.- Que la Corporación Municipal Organizadora de las Fiestas
se encargue de dar a todos los actos el máximo esplendor.”
La Corporación Municipal organizó los festejos de
este año, cuyos principales días transcurrieron entre el domingo 7 y el lunes 8
de octubre. En la mañana de este último día se ofició una misa, con la
asistencia del Gobernador Civil, Manuel Ballesteros Gaibrois y una amplia
representación de autoridades provinciales y locales, además de la totalidad de
la corporación aronera. Y como consta en el programa de los festejos: Antes
del comienzo de la Santa Misa será bendecida la vara repujada de plata y oro,
donación particular de los componentes de la Corporación Municipal y
ofrecimiento de la misma por el Sr. Alcalde al Santísimo Cristo de la Salud
como Alcalde Perpetuo de Arona. Vara
que se abonó con el superávit, más de siete mil pesetas, que se obtuvo de los
festejos de este año, según consta en el acuerdo del pleno del 27 de septiembre
de 1963.
![]() |
Portada programa de 1962 |
En el Pleno citado, de
agosto del 62, y dado el carácter extraordinario que iban a tener las
conmemoraciones, se acordó nombrar la siguiente comisión: Presidente honorario:
Gobernador Civil de la Provincia, Manuel Ballesteros Gaibrois. Vice Presidente
honorario, José Manuel Calamita González, médico titular. Presidente de la
Comisión de Fiestas, Buenaventura Ordóñez Vellar, Alcalde de este Ayuntamiento.
Vice Presidente, Juan Bethencourt Fumero. Tesorero, el concejal Eladio Frías.
Secretario, José Pérez Reverón. Vocales: los concejales, Antonio Domínguez
Alfonso, Fulgencio Díaz Bernal, Agustín Alfonso Frías, Eduardo Domínguez
Sierra, Juan Villareal Frías, Juan Reverón y Paulino García. Juez de Paz, José
Manuel Encinoso Mena. Jefe Local de Falange, Manuel Pérez Toro. Hermanos del
Santísimo Cristo de la Salud. Maestros y Maestras Nacionales. Vocales
Honorarios: Eugenio Domínguez Alfonso. José A. Tavío Alfonso. Miguel Bello
Rodríguez. José Vicente Pérez de Valero. Luis Bethencourt Fumero. Ildefonso
Bello Bello. Antonio Feo Rodríguez. Antonio Sáez Izquierdo. Enrique Ascanio.
Gumersindo Robayna Galván. Hernán Cortes. Sres. Betancort. Florentín Castro
Fariña. Vda. e hijos de Casiano Alfonso. Emilio Jimeno Martín. Luciano Bello.
Santiago Rojas. Antonio M. Alfonso Izquierdo. Salvador Reyes y Rosario y
Mariana Calzadilla Alfonso.
De los actos celebrados en
1962 cabe resaltar la convocatoria de un certamen literario, con los siguientes
premios: un primero, dotado de 1.500 ptas., “a la mejor composición poética
en verso que cante al Santísimo Cristo de la Salud como Alcalde Perpetuo de
Arona”; y
otras cuatro distinciones. En la recopilación de gastos de ese año se anotan
los pagos a los premiados: 1.500 pesetas para el “Sr. Domínguez”; a Ramón Caeiro Chan y al
“Sr. Castañeda”, mil pesetas a cada uno; y quinientas al “Sr. Toro”.
Dos años después se aprueba
en Pleno Municipal denominar a la plaza de la Parroquia de San Antonio Abad,
Plaza del Cristo de la Salud. Propuesta que se aprueba con fecha del 16 de
septiembre de 1964, tal como se recoge en uno de sus puntos: A continuación,
el señor Presidente señala la necesidad de dar un nombre a la plaza del casco
de esta población, y propone como tal el del Santísimo Cristo de la Salud, y la
Corporación acuerda por unanimidad aprobar esta denominación. Y fue el 11 de noviembre
de ese mismo año cuando se bendice le reformada plaza, a la que se le dio el
nombre de Cristo de la Salud, para cuya ocasión estuvo presente el Gobernador
Civil de la Provincia, Pablos Abril.
Plaza del Cristo de la Salud que ha cambiado de
configuración, pero que sigue acogiendo los avatares de los aroneros, los de la
costa y los de tierra adentro, sus plegarias y sus regocijos, sus llantos y sus
alegrías. Y que atesora recuerdos por cada una de sus esquinas, como esos
viejos laureles, que a algunos se les conoce por su nombre, como el de Pepe
Almeida, porque fue este carpintero quien lo plantó en los años veinte; o el de
Eduardo Peña, quien le dio vida y mimos allá por los sesenta.
BRITO, Marcos: Arona. Tradiciones
festivas. Llanoazur ediciones
No hay comentarios:
Publicar un comentario