martes, 13 de agosto de 2013

Juan de Dios Morales, Juan el Negro








 
Juan de Dios Morales y Dolores Navarro Correa

El apodo de Juan de Dios Morales, Juan el Negro, provenía por el color de su piel, por su procedencia africana. Las referencias sobre Juan el Negro se inician en La Gomera, en cuya Isla forma pareja con Dolores Navarro Correa. Desde allí se trasladan a Puerto de Santiago, donde nació en 1935 su primera hija, Serafina; su segunda hija, Juana, lo fue en Alcalá en 1938, en cuyo lugar se establecen definitivamente y desde donde se dedicaron a comprar y vender los productos de la mar. En el Censo Electoral de Guía de Isora, para el año de 1965, Juan de Dios Morales residía en Alcalá con la edad de 55 años y de profesión obrero. Dolores Navarro Correa, contaba con 60 años; y sus hijos: Serafina, 29 años. Juana, 27. María, 25. Dolores, 24. Y Antonio, 22 años.
Juan de Dios Morales, Juan el Negro, trabajó en la conservera de pescado de Álvaro Rodríguez López y en faenas de albañilería; hasta que se dedicó a la venta de pescado, llevándolo a Icod de los Vinos. Sobre ello, apunta Serafina de Dios Navarro, Fina: mi padre veces se quedaba en Icod y yo cogía y salía de aquí a las doce de la noche con cuatro o cinco mujeres, compraba el pescado. Mi madre, en paz descanse lo empaquetaba y después lo llevaba a Guía, caminando por áhi parriba, y llegaba arriba a las cuatro y media, cinco menos cuarto, que salía la guagua pa Icod, la jardinera que le decían. Y mi padre estaba esperando en Icod y yo mandaba el pescado pa Icod.
Juan el Negro era conocido y querido en cada rincón por el que realizó este trasiego. Como apunta la vecina de Alcalá, Crisanta Herrera Vargas, él vino aquí vendiendo ropa y ya se quedó aquí, se enamoró en La Gomera, de doña Dolores, se la trajo paquí, después vino aquí, empezó a vender pescado seco, compraba pescado, bogas, chicharros y caballas, las secaba en esas lajas, que usté ve todas fabricadas, jareadas, y las iba a vender al norte.
En Icod de los Vinos también guardan gratos recuerdos de Juan el Negro, tal como añade la pescadora de Icod, María de los Ángeles Herrera Hernández, que a comienzos de los cincuenta, se hizo cargo de un local ubicado en la carretera general, en el que distribuía el producto de la pesca a otras pescadoras. Juan el Negro me traía el pescado y yo se lo despachaba a las vendedoras. A mi me traían pescado los camiones que venían del Sur, venían del Puerto, venían de Santa Cruz, entonces yo se lo despachaba a las vendedoras y se lo cobraba. Juan de Dios Morales, Juan el Negro, realizó estas labores hasta mediados de la década de los años cincuenta. Además de acarrearlo para Icod de los Vinos también lo vendió en Santa Cruz de Tenerife, a donde iba en un barco que transportaba el pescado de la conservera de Álvaro Rodríguez López. En su mayoría eran jareas que las vendía en la Recova chicharrera e incluso las comercializaba en Tacoronte.
Este apodo aún lo mantiene su hija Juana de Dios Navarro, Juana la Negra, y cuyo restaurante, abierto a comienzo de la década de los años setenta, se le cita en la publicación de Chucho Dorta sobre Alcalá. Un mediodía degustando el sabroso pescado del Sur en casa de Juana la Negra enfrente de un nostálgico cuadro del viejo y blanco Alcalá.

Documentación:
BRITO, Marcos: Nombretes en el Sur de Tenerife. Llanoazur ediciones

1 comentario:

  1. YO ME QUEDO BOBA COMO DIRIA MI ABUELA LOLA QUE ERA DE SANMIGEL ESTAS ISTRIAS ME GUSTA MUCHISIÑO YO LEO TODAS LAS QUE ENCUETRO PUBLICADAS Y ES QUE LAS VIVO GRACIAS POR PUBLICAR ESTAS ISTORIAS BASADAS EN LA VIDA REAL

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