viernes, 27 de septiembre de 2013

Aeródromo en Los Llanos de Roja. El Médano


 
Día de la inauguración, 30 de septiembre de 1962
Fotografía de Pedro Alemany Nuez


 
 
Han sido muchos los proyectos de pistas de aterrizajes que se han quedado en este Sur sin una ejecución definitiva, en varios casos se dispuso algún llano para el posible aterrizaje de avionetas, hasta que en 1978 se inauguró el Aeropuerto Tenerife Sur. El tantas veces añorado aeródromo poseyó varios proyectos para su ejecución, desde el acondicionamiento de la pista del campo de El Bailadero, en los alrededores de donde está ubicada la Casa del Caminero, en Arico, lugar en el que aterrizaron dos avionetas en enero de 1924. O el caso de Los Cristianos, con sus múltiples posibilidades; se estudió, a finales de los años veinte y comienzos de los treinta, la viabilidad de instalar un poste de amarre para globos dirigibles, su cielo lo cruzó el Gran Zeppelín en 1930; de utilizar la bahía para el amerizaje de hidroaviones, en cuyas aguas estuvieron diversos de estos aparatos; y las llanuras de El Camisón para aterrizajes de aeronaves, donde en una pista improvisada, al norte de las salinas de El Guincho, aterrizó el piloto lagunero Augusto Puga en octubre de 1933. Hasta finales de los años treinta, cuando se toma la decisión de que el aeropuerto fuese en Los Rodeos y que se realice uno auxiliar en El Médano, al norte de Montaña Roja. Asimismo se pensó en situarlo en las cercanías de Las Galletas, o ya a finales de la década de los sesenta se estudió la posibilidad de construir un aeropuerto en la zona de Ten-Bel.
La posibilidad de disponer las llanuras del Llano de Roja, en El Médano, en el Municipio de Granadilla de Abona, se venía contemplando desde, por lo menos, los alrededores del año treinta. Su uso se consideraba como campo complementario o auxiliar, en las circunstancias de que la existencia de niebla en Los Rodeos hiciera imposible el aterrizaje, de manera que los aviones no tuvieran que desplazarse al de Gando, en Gran Canaria. Después de sortear muchas reticencias se dispuso una pista en el lado norte de Montaña Roja, que fue inaugurada el 12 de agosto de 1935. Este día aterrizó una avioneta pilotada por el aviador Fernández Navamuel.
A este acto asistieron numerosos vecinos del municipio de Granadilla de Abona, además de los pueblos limítrofes. Las autoridades del municipio obsequiaron al piloto y al mecánico a un almuerzo, al que asistió, entre otras muchas personalidades, el responsable de esta iniciativa, Martín Rodríguez Díaz-Llanos. Asimismo se realizó un pequeño vuelo llevando como pasajero al entonces alcalde de Granadilla de Abona, Manuel Batista Rojas, después de lo cual la avioneta partió rumbo a Los Rodeos, trayecto que se cubría en unos veinticinco minutos. 
Aquí quedó un tanto en el olvido esta pequeña pista, utilizada ocasionalmente por alguna avioneta de recreo, hasta que se volvió a estudiar la viabilidad de una pista auxiliar a Los Rodeos. Fue al comienzo de la década de los sesenta, cuando se prepara de nuevo esta pista, que se inaugura el domingo 30 de septiembre de 1962, denominándose `Aeródromo Tomás Zerolo´

 
Día de la inauguración, 30 de septiembre de 1962
Fotografía de Pedro Alemany Nuez
Situado al pie de la Montaña Roja en El Médano, en el Llano de Roja, este campo auxiliar del aeropuerto nacional de Los Rodeos contaba con balizas para servicio diurno, con una torre de control dispuesto para instalar el equipo de ayuda a la navegación. Con una pista de 700 metros de largo por 60 de ancho, que podría ser utilizada por aviones de hasta 24.000 kilos de peso. El Aeroclub Club de Tenerife pretendía ampliar la longitud de la pista de aterrizaje hasta los 1.200 metros.
Las nuevas instalaciones fueron bendecidas por el Prelado de la Diócesis, Luis Franco Cascón, y a la que asistieron las principales autoridades de las islas, entre las que cabe citar al Capitán General de Canarias, Ramón Gotarredona Prats; al Jefe de la Zona Aérea de Canarias, el general Alfonso Carrillo Durán, que se trasladó desde Gando en un trimotor militar; el Presidente del Aero Club de Tenerife, Lorenzo Machado o el Alcalde de Granadilla de Abona, Evaristo Gómez González. Además de “un enorme gentío, llegados de todos los lugares de la Isla, forma un círculo muy amplio en torno al campo. Los automóviles se cuentan a centenares. En grandes camiones embanderados han venido al Médano numerosas familias.”
Ese día aterrizaron en este aeródromo diversos aparatos. Un trimotor militar Junker; de la base de Gando, tripulado por el Comandante Timón, y que trasladaba al Jefe de la Zona Aérea de Canarias, Alfonso Carrillo Durán. Una escuadrilla de cazabombarderos T-6, al mando del Jefe de las Fuerzas Aéreas de la base de Gando, el teniente coronel Soriano, que efectuaron una exhibición antes de su aterrizaje. Seis avionetas del Aero Club Tenerife, que transportaron desde Los Rodeos a muchos de sus asociados. Una avioneta del Sector Aéreo de Tenerife, y un Douglas DC-3 de las Iberia Líneas Aéreas, primer avión comercial que tomaba tierra en El Médano, pilotado por Vicente Ramos Hernández. Aterrizaje y posterior despegue que se efectuaron con normalidad, no llegando a utilizarse la totalidad de la pista.
Se bendijeron las instalaciones, descubriéndose una placa conmemorativa fijada en la torre de control, acto que estuvo amenizado por la banda de música de Granadilla. Fueron momentos de agradecimientos y parabienes, como la del Prelado elogiando el esfuerzo realizado, o las del Jefe de la Zona Aérea de Canarias, Alfonso Carrillo, en el momento de descubrir la placa conmemorativa, el cual glosó la figura del ya entonces fallecido Tomás Zerolo, así como resaltar los que habían hecho posible este aeródromo, el Aero Club de Tenerife y el Ayuntamiento de Granadilla de Abona.
Con posterioridad se trasladaron al Hotel Médano, aún sin inaugurar, donde la Corporación Municipal dispuso un almuerzo, en cuyo momento el Presidente del Aero Club de Tenerife, Lorenzo Machado, y el Alcalde de Granadilla de Abona, Evaristo Gómez, pronunciaron una palabras alusivas al acto. Después del cual se trasladaron otra vez a la pista de aterrizaje para retornar a sus puntos de partida.
Este aeródromo que tomó el nombre de un veraneante ilustre, de un enamorado de esta costa y gran defensor de su construcción, el médico Tomás Zerolo Fuentes, se comenzó a utilizarse por pequeñas avionetas, en la década de los años treinta. Con esta nueva inauguración, del 30 de septiembre de 1962, se pretendía potenciar el turismo de la zona, a través de la instauración de aero-taxis con conexiones con el de Los Rodeos. Incluso se planteó la posibilidad, por parte del Cabildo Insular de Tenerife, de asfaltar su pista en 1964. Pero en lugar de acondicionarla, estudios posteriores aconsejaron una nueva construcción, que aunque con enorme retraso, como casi todo lo que se realiza en este Sur, es el actual Aeropuerto Tenerife Sur. La pista del Llano de Roja se continuó utilizándose por pequeñas avionetas de recreo y sobre todo fue de gran utilidad para evacuar algunos de los heridos en ese día de una de las mayores tragedias que ha padecido el Sur de Tenerife. Un domingo gris, lluvioso y frío, del 3 de febrero de 1963, cuando 23 personas murieron por el desplome de una galería del Ayuntamiento de Granadilla de Abona.