lunes, 24 de noviembre de 2014

Colores del Sur 14. Jarea de vieja



Colores del Sur 14. Jarea de vieja

Imagen en la que se aprecia los inicios del proceso para la obtención de la jarea de vieja. Múltiples colores rojizos, tonalidades brillantes en la piel de este ejemplar; carne densa, blanquecina con ligeros matices que van del rojo al azul. Que una vez seca se torna de infinitos canelos con visos rojizos y azulados.
El pescado que no se consumía o comercializaba en los primeros momentos había que conservarlo en forma de jareas o seco, sobre todo al aumentar las capturas con la utilización de chinchorros, traiñas o salemeras. Se jareaba casi todo tipo de pescado, sobre todo de caballas y sardinas, pero también de viejas, las más apreciadas, e incluso de morenas. Como apunta Leopoldo Díaz, pescador de Los Cristianos, antes desde el peje verde al mero había que rajarlo. El procedimiento a seguir es abrir el pescado por las ventrechas, en la mayoría de los casos, o por el lomo sí eran fulas o sardinas, al igual que las morenas que se alañaban por el alto cerro. Se coloca en sal de hoy pa mañana o de la mañana pa la noche, después se lava y se tendían al sol, a lo largo de la costa o en las liñas de tender la ropa. Para consumirlas en los días siguientes con un día de sol es suficiente, a estas jareas se les denominan frescalitas. Si se quiere conservar más tiempo se deja dos o tres días al sol, dependiendo del grueso del pescado y de su intensidad. Sobre jareas es el relato de la vecina de Playa de San Juan, María de la Luz Alonso Santana: De un día para otro. Las cogían hoy, las abríamos hoy, las salábamos, si yo no estaba, mi marido, las dejábamos como dos horas con sal, se lavaban bien lavaditas y después toda la tarde al sol y antes de oscurecerse se recogían para llevarlas al otro día a vender, iban frescalitas, secas no, esas jareas que vemos secas, no, frescalitas.

Fotografía: Jarea de vieja. Elaborada por mi madre, Teresa Martín Melo. Los Cristianos, 2006.



 
Documentación: BRITO, Marcos: Marchantas o pescadoras en Arona. Y Pescadoras, marchantas o barqueras. Vendedoras de pescado en el Sur de Tenerife. Llanoazur ediciones